En España se genera una media de 1,2 Kg de basura por persona y día, aproximadamente la mitad se recicla, sin embargo el resto acaba en un vertedero, según los datos extraídos del INE (Instituto Nacional de Estadística).

Además, se prevé un aumento de la cifra con el paso de los años, por lo que la gestión de residuos de forma responsable no sólo es una necesidad, sino una obligación por parte de todos los países. La mala gestión de la basura es una de las principales causas de contaminación, malos olores, efecto invernadero, entre otras consecuencias.

Tipos de residuos

Para ello, es preciso llevar a cabo una gestión eficiente de los desperdicios. Hay tres tipos de residuos:

  • Residuos no peligrosos
  • Residuos Peligrosos
  • Residuos de la Construcción y Demolición

Tratamientos

Los principales métodos de gestión de residuos incluyen: vertederos, incineración, compostaje, digestión anaerobia, tratamiento biológico, pirólisis o Gasificación.

El objetivo es reducir el impacto sobre el medio ambiente y la salud y mejorar la eficiencia en el uso de los recursos. El objetivo a largo plazo de las políticas en la Unión Europea es disminuir la cantidad de residuos generados y promover los residuos como recurso, así como lograr niveles más elevados de reciclado y una eliminación de residuos segura.

Sin duda, para lograr este objetivo es esencial contratar los servicios de una empresa especializada como AZCATEC en Ingeniería de detalle, supervisión y dirección de obras, legalización y estudio, o proyectos llave en mano. De este modo, se protege la máxima calidad y eficiencia en el tratamiento y la gestión de residuos.

Vertedero de residuos no peligrosos

Situación actual en España

Actualmente, es el Plan Estatal Marco de Gestión de Residuos (PEMAR) el que recoge los objetivos para el período 2015-2020 en la gestión de RSU en cuanto a reutilización, reciclaje, valorización y eliminación.

Específicamente, el PEMAR propone:

  • Incrementar la valorización energética de los RSU hasta el 15% en 2020 (mediante instalaciones de incineración o co-incineración).
  • Limitar la valorización energética a los rechazos procedentes de instalaciones de tratamiento.
  • Valorizar energéticamente parte de los rechazos producidos en las instalaciones de tratamiento mecánico-biológico (directamente o mediante la producción de Combustible Derivado de Residuo (CDR)).
  • Limitar al 35% el vertido del total de los residuos urbanos generados para antes de 2020.